El nuevo secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Albert Ramdin, expresó su intención de establecer puentes de comunicación entre el oficialismo y los sectores opositores en Venezuela.
En una entrevista con la agencia de noticias EFE, el funcionario aseguró que no iba a discutir si el régimen de Nicolás Maduro “es una dictadura o no. Para mí es importante que si hay un problema sobre democracia y elecciones tratemos de resolverlo para que haya estabilidad política en el futuro”.
Lea también: Padrino López sobre el conflicto de Israel e Irán: “El planeta se está calentando y eso también viene para acá”
Ramdin, originario de Surinam y primer secretario general caribeño en liderar la OEA, insistió en que su enfoque estará centrado en abrir espacios de conversación. “Quiero promover un enfoque basado en el diálogo con el gobierno, pero también con la oposición en Venezuela, con todos los partidos”, afirmó, al ser consultado sobre el rol del organismo frente a la crisis política venezolana.
Ante la cercanía del primer aniversario de las elecciones presidenciales en Venezuela —comicios que generaron cuestionamientos y peticiones de transparencia por parte de la OEA—, el diplomático evitó adelantar posibles acciones de presión, pero dejó claro que su prioridad será buscar entendimientos que apunten a la estabilidad institucional.
Durante la conversación, Ramdin respondió también a críticas sobre la pertinencia de dialogar con regímenes señalados por prácticas autoritarias. “Para mí dialogar es un principio básico. Solo decir que es una dictadura, ¿y después? Necesito soluciones”, remarcó.
Ramdin busca consolidar a la OEA como mediadora regional
La entrevista se realizó desde su despacho en la sede de la OEA, en Washington, mientras avanza la preparación de la próxima Asamblea General del organismo, prevista entre el 25 y 27 de junio en Antigua y Barbuda. El encuentro será el primero bajo su mandato, luego de suceder a Luis Almagro en el cargo el pasado mes de mayo.
Ramdin también abordó otros temas como la situación de Nicaragua tras su salida de la OEA y la política migratoria estadounidense, aclarando que su mayor apuesta en esta nueva etapa será fortalecer el rol del organismo como mediador regional. “Los principios de la OEA son importantes”, dijo.
