
El dólar registra una fuerte caída en el arranque de las operaciones de hoy martes, en una sesión marcada por el alto al fuego entre Israel e Irán, pero también pendiente de si ambos bandos cumplirán el acuerdo mediado por Donald Trump.
Tras una hora de transacciones, el tipo de cambio se instala en $ 939,77, lo que representa una baja de $ 6,98 en relación al cierre de la jornada previa.
Se trata de la mayor caída diaria en tres semanas.
Esta baja es coherente con la tendencia global de la divisa. El dollar index que lo mide frente a una canasta de monedas líquidas como el euro y el yen, retrocede un 0,33% en este minuto.
“(Hay) cierta cautela tras declaraciones que apuntan a eventuales incumplimientos del pacto. De todos modos, el solo hecho de existir conversaciones orientadas a frenar la escalada ya es interpretado como una señal constructiva por los mercados”, dijo Ricardo Bustamante, subgerente de estudios de Capitaria.

El peso chileno se ve favorecido también por el cobre, cuyos futuros escalan 0,72% en el Comex de Nueva York. En otra buena noticia para Chile, y en el mismo contexto de alivio, el petróleo sufre una dura caída tanto en Londres como Nueva York.
“Los inversionistas comienzan a desarmar posiciones defensivas, favoreciendo a monedas emergentes como el peso chileno. Este movimiento se ve reforzado por el repunte del precio del cobre, que supera los 4,90 dólares la libra, impulsado por un entorno más optimista para la actividad industrial global”, agregó el experto.
La Fed y la tasa de interés
A nivel macroeconómico, la atención de la jornada se centra en la testificación semestral de Jerome Powell ante la Cámara de Representantes en EE.UU.

De momento, ya se sabe que en el Congreso dirá que no tiene apuro en bajar la tasa de interés.
La Reserva Federal tiene el deber de evitar que un aumento único de los precios se convierta en un “problema de inflación continuo”, dijo Powell en comentarios preparados para el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes.
“Por el momento, estamos bien posicionados para esperar a conocer mejor el curso probable de la economía antes de considerar cualquier ajuste a nuestra postura política”, añadió.